Hoy, pegado todo el viaje a la superficie del manto blanco de las nubes
parecía que íbamos en carro por un desierto distinto y blanco, una tierra pura toda
suavidad alba de gotas y nada, y me acordé de esos bichos abisales que
llevan, como Diógenes, su propio farolillo, mientras le cambio las pilas
a mi linterna para leer "el Gran Vehículo para torpes"...-Aunque mi
visión sea tan espaciosa como el cielo, mis acciones y mi respeto por la
rueda de las causas, los efectos, y las
condiciones, son tan finos como los granos de harina- ...mmm, está
complicado, tanto como arder en deseo y ternura ecuánime por siete mil
millones de simios sin pelo, la rueda debajo del arnés, las gafas, y los
auriculares, la rueda sobre el manto blanco de harina, al fin un
descanso de esta enorme foto sobreexpuesta del oro pobre y dunero del
yermo, manto fresco y blanco como una tierra envuelta en una sábana
limpia, un juez le ha dado la libertad a una orangutana, a mí me la dan
el siete, y la ha llamado persona, persona no humana, el último estudio
sobre los cuervos los coloca a la altura de los primates superiores en
muchos afectos y razones, eso, eso, seamos eso, en los abismos o en el
suelo del manto blanco, persona no humana...
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