Alfa
la onda de no te enteras del abc de la bbc broadcasting “pain in spain”, ni
vivo ni muerto, ni dormido ni despierto, ni las hembras ni los machos parados
alfa consiguen ese relajo alfa, las pantallas son el califato del alifato que
ignora a los que no pueden comer ni alfalfa, origen, sueño, revuelta, alfa, la
revolución copernicana es la órbita completa de una esfera celeste alrededor de ...seis millones de parados, erre que
erre, erre sobre evolución para que ruede la revolución, cojones, seis
millones, ones, ones, revoluciones, abundantes en el corazón de los motores y
escasas en el de los hombres, también las
hay del peinado porque tú te lo mereces, o prueba, si te parece más fácil, la
obediencia, el gobierno recomienda que no comas y pagues la hipoteca, pero si
no te llega para ninguna de las dos cosas aún puedes cenar esta sopa de letras
para que hiervas, alfa y beta, mira, en Grecia es sopa de solo dos letras, y alef y ba, al Sur del Estrecho buscan en la
harira el comino fino del alef y el granito de cus-cus que lleva bajo la quilla
la barquita de la ba, alef, ba, ta, ta, tatatá, traducido, Marte está pensando
en atacar, y eso que desde los tiempos del lineal B, solo se escuchaban los
balidos lineales de beeee, beeee, beeeeeee. ¿lo ves?¿lo ves? Parado en América
es estar de pie, en pie, en pie, por Cipriano Mera, mejor vivir de pie, si la
olla no estalla es porque tiene fugas, emigrantes que se fugan, chapuzas, madres,
novias, amigos, prostitución, camelleo, contrabando, limosnas, milagros,
sablazos, y otras válvulas de seguridad, origen, sueño, revuelta, alfa, más
profundo que el analfabetismo digital es el de la pública moral, alfa, alfa,
Juanito, tienes que estar macandé para cantar en la plaza de la Alfalfa…”como
un perrillo sin amo, el mundo es tuyo”…Seguro que tienes la llave si puedes
cantar en el invierno tardo-capitalista y tecno-idiota con flamencos ni
arrinconados ni cortadillos, hay que aprender primero de transmutación con los
escapistas y los artistas, caen las hojas de los CV´s alfombrando los suelos de
las ciudades y nadie sabe cuánta podredumbre es necesaria para que la ley ya no
sea legítima, ele, ele, ele, ese camello macandé de ele ese de que dibuja con
carbón del brasero las paredes de la calle Huelva y ab nihilo crea seis
millones de fiestas gitanas, gatos, computadoras y golems de la guasa, paro y
espera que te compren sin volverte macandé, como los animalitos cautivos del
antiguo mercadillo de la Alfalfa, alfa, alfa, origen, revuelta, sueño, alfa, transmite
oralmente el fin de la epopeya de seis millones de versos tristes y orgánicos,
caras de poema en la cara, seis millones, cojones, ones, ones, revoluciones…
