LA TIERRA DE LA PIEDRA NEGRA


¿Querrían convertirse en desiertos en el desierto,
en luz naranja de risa y llanto,
volverse viento y dicha en la arena, néctar, escalofrío, libertad...

martes, 4 de enero de 2011

MAR DE LA EXTINCIÓN



En la mar con Mar, hablando del mar y la muerte, de la extinción, de vidas y formas breves, de paraísos, recogemos conchas mientras dejamos que la perrita Anubis se vuelva loca. Y digo estar casi seguro, convencido, vivir es siempre morir un millón de veces. Esas casas abandonadas de cal seca albergaron a multitud de seres que nadie recordará, como versos viejos o caracolas lejos de aquí que ni siquiera después de unos días podrán hacernos revivir este mar de hoy. Mira, -digo señalando el mar- si morir fuera nirvana o arena, resucitar en un mar luminoso sin forma y sin nombre como éste, en tus labios pintados o en los hematomas de tu culo estrellado, si desaparecer fuera bañarse en este olvido brillante sobre el tapiz crujiente de esqueletos de chocos, navajas y almejas, o disolverse sobre esta orilla de abrazo y madre rompiente, sería errado, ridículo, cualquier sufrir.

2 comentarios:

mareva mayo dijo...

y sin embargo a veces la mar ansia algún ahogado....

Anónimo dijo...

querido daniel, el anónimo en el anonimato no quiere ser anónimo sino ánimo. Sigo tu blog. Hoy me pregunto: dónde y porqué viró tu nave de psiconauta, hoy me gustas.